Tierra y cielo.

Alguna vez lo has estado tú.
Alguna vez lo hemos estado todos.

Acogidos.
Salvados.
Protegidos.
Reconfortados.

Por la mirada.
Por las palabras.
Por las manos.
Por el abrazo.


En la soledad.
En el miedo.
En la inquietud.
En la desesperación.

Y siempre.
Siempre.
Acudió quien supo ver la calamidad.
La vida en pesadilla.

Y te dió calor, para cubrirte del frío de aquel que no te siente.
Y agua, para apagar la sed de tu destino.
Y alimento, para saciar tu hambre de justicia.
Y ropa, para cubrir la desnudez de tu indefensión.

Recuérdalo. 
Desde el  bullicio de los días.
Desde la quietud de la noche.

Hoy se celebra el Día Mundial del Refugiado.

Los refugiados no tiene culpa alguna de las insanías de sus gobiernos, del fanatismo de las religiones insatisfechas, de la codicia y avaricia del hombre.

Solo quieren vivir en paz.
Y tierra, para construir su futuro.
Y cielo donde poder escribir,
buenos días esperanza en las mañanas,
dulces sueños en las noches.