Termómetro de Galileo

Galileo Galilei no solo fue astrónomo, además es el inventor de un curioso termómetro.

En la imagen anterior podemos ver el llamado "termómetro de Galileo". 

Si observas bien verás que es un tubo cerrado en ambos extremos, relleno de un líquido, que suele ser etanol o agua, y donde al mismo tiempo se disponen una serie de semiesferitas rellenas parcialmente de un líquido coloreado, y de cada una de ellas cuelga una chapa con un número y el símbolo ºC. 

En definitiva, las chapas de las semiesferas, cuando procedamos a su correcta lectura, nos van a indicar la temperatura ambiente, ahora bien de forma un tanto grosera, ya que se produce en intervalos de 2ºC, desde 16ºC hasta 26ºC generalmente, lo cual ya nos hace ver que el rango de medición es más bien estrecho.

Este termómetro se basa en dos principios:

- el principio de Arquímedes: un cuerpo total o parcialmente sumergido en un líquido sufre un empuje hacia arriba que es proporcional al peso del volumen del líquido que desaloja. ¿Has visto cuando por las doradas playas te sumerges en el azul inmenso parace que pesas menos? Pues es el principio de Arquímedes en acción.
- la densidad de un líquido a diferentes temperaturas, generalmente un líquido con el calor disminuye su densidad, y con el frío aumenta su densidad.

Combinando ambos principios, las semiesferas suben o bajan dependiendo de la temperatura ambiente, y así con el frío ascienden, y con el calor descienden.

Para hacer una lectura correcta, lo único que debemos hacer es fijarnos en el valor de la chapa de la última semiesfera colocada en la parte superior, en la imagen sería de 24ºC.

Si todas están en la parte inferior, la temperatura es  26ºC o más (pero no la aprecia o mide)

Si todas están en la parte superior, la temperatura sería el valor que marque la última semiesfera, en este caso 16ºC, o menos (tampoco aprecia temperaturas inferiores a 16ºC).

Finalmente os aconsejo leer esta página, en ellas podrás descubrir si el prolífico Galileo fue o no el inventor de este maravilloso, y por qué no decirlo, estético... artilugio.

- El termómetro ese como se llame...


Por cierto, Galileo realmente miraba la Luna... una de las aportaciones más importantes de Galileo a la astronomía, fueron sus observaciones lunares y sus investigaciones sobre los movimientos de nuestro satélite. 
Fascinación e intriga, simplemente... movieron, y guardaron, su vivida y vívida vida.